Subscribe:

miércoles, 16 de marzo de 2022

CONSEJOS DE AUTOCUIDADO EN PERSONAS MAYORES

Autocuidado son todas aquellas acciones que los individuos realizan para mantener y promover su salud, asumiendo voluntariamente la responsabilidad sobre el cuidado de su salud, vida y bienestar. 

 

Estas acciones de autocuidado se han de adaptar en cada etapa de la vida; así los autocuidados son diferentes en bebés y niños pequeños que en adultos jóvenes o personas mayores. En los mayores, los autocuidados deben dirigirse a mantener, limitar y “suavizar” el declive general natural que comporta el paso del tiempo, para llegar a un envejecimiento pleno y saludable.

En este artículo hablaremos de unas acciones que ya deberían realizarse en toda etapa de la vida, y otras que son más específicas de esta etapa. Vamos a introducir estos ejes principales de cuidado:

 

Alimentos que no pueden faltar

 

 Como a cualquier edad, la alimentación recomendada ha de basarse en la más saludable, principalmente la mediterránea, pero adaptada a las peculiaridades de las personas mayores. En el envejecimiento encontramos disminución de la producción de saliva y de los movimientos del tubo digestivo, posibles pérdidas de piezas dentarias, y los requerimientos de nutrientes varían en proporción debido a los cambios en gasto calórico y otras necesidades.
Así pues, basándonos en la dieta mediterránea, en la alimentación de las personas mayores es necesario que haya un ligero aumento de la proporción de proteínas (principalmente provenientes de pescados y carnes blancas y menos de carnes rojas). Importante también es el aporte de fibra (fruta, verduras, cereales integrales), sobre todo teniendo en cuenta el enlentecimiento de los movimientos del intestino, que predispone al estreñimiento.
Además, aparte de la composición de la dieta, en la alimentación de los mayores hemos de recomendar que las comidas sean a horas regulares, ajustando su textura al estado de la boca y piezas dentarias, comiendo con el tiempo suficiente para evitar atragantamientos.
Y, finalmente, es importante asegurar también la hidratación; las personas mayores pierden la sensación de sed, de manera que la toma de agua, infusiones, zumos… ha de asegurarse a lo largo del día, a pesar de que no se sienta sed.

     

                          





Consejos para ir al baño


 En la persona mayor solemos encontrar problemas como estreñimiento e incontinencia urinaria, asociada o no a debilidad del suelo de la pelvis o a problemas prostáticos.
Siendo conscientes de estas situaciones, ya hemos hablado de la necesidad de aumentar la ingesta de fibra, y de evitar el sedentarismo (el movimiento del cuerpo comporta movimiento de los intestinos). Ayuda también mantener un horario para ir al baño a defecar.
Respecto la micción, es conveniente asegurar un acceso fácil al cuarto de baño, así como asegurar ropas que sean sencillas de poner y quitar a la hora de ir al baño. Las personas mayores han de evitar pasar mucho rato sin orinar (es mejor ir cada tres o cuatro horas para evitar ir con prisas después y arriesgarse a un “accidente”).

 

 

Aprende a conciliar el sueño y descansar bien


A medida que nos hacemos mayores, la estructura del sueño cambia, y nuestras necesidades también. Pero esto no quiere decir que el insomnio tenga que ser la norma.

  • Es conveniente equilibrar la actividad física con el descanso, evitando de todas formas un cansancio excesivo. Cansarse no es tener sueño. Se recomienda asimismo que las siestas no excedan los 30 minutos.

  • Se han de evitar comidas copiosas antes de acostarse, así como la toma de excitantes (café, colas, té, chocolates) o alcohol. También debe evitarse la excitación mental antes de irnos a dormir (programas de televisión, lecturas, redes sociales, etc.)

  • En la medida de lo posible se ha de respetar una rutina a la hora de acostarse y levantarse, y asegurarnos que el entorno sea cómodo, bien ventilado evitando temperaturas extremas, y aislado de estímulos externos como luz y ruidos.

     

     

    Practica ejercicio y evita caídas


    El ejercicio es importante en todas las edades, pero más aún en las personas mayores. La actividad física mantiene articulaciones, huesos y músculos en buen estado, mejorando el equilibrio y disminuyendo el riesgo de caídas y lesiones. Sin embargo, el ejercicio debe ajustarse a la situación en la que esté la persona, evitando el agotamiento. Y sobre todo que sea una actividad regular y agradable de hacer.
    Las caídas en las personas mayores constituyen un riesgo importante, por las lesiones y secuelas que pueden comportar. Además de mantener actividad física que ayudará a mejorar el equilibrio, es importante que el entorno también esté adaptado: bien iluminado, sin elementos sueltos en el suelo (alfombras, cables, etc.)





                          

 Cuida tu higiene y salud dental


Una de las señales más conocidas del envejecimiento son los cambios en la piel: se afina, se arruga, pierde firmeza y elasticidad. Es decir, se vuelve más frágil. Así pues, es importante ser más escrupulosos con el cuidado de la piel en las personas mayores.
La higiene corporal ha de ser diaria (mejor ducha que baño) con agua tibia y usando escasa cantidad de jabón (preferiblemente neutro para la piel). El secado se hará sin frotar, insistiendo en los pliegues para evitar el acúmulo de humedad. También es aconsejable la aplicación de cremas o lociones hidratantes.

El cuidado de la boca también es importante. Cepillado tras cada comida (o al menos dos veces al día) con cepillo suave.


El oído y vista


Otra de las cosas que parece acompañar a la vejez es la disminución de agudeza visual y auditiva. Aunque en muchas ocasiones no podemos evitarlo, sí que podemos mantener ojos y oídos en buenas condiciones

  • Respecto los ojos, es importante, en caso de necesitar lentes para corregir problemas de refracción, que se usen adecuadamente y en los momentos necesarios, así como usar iluminación adecuada cuando se realicen tareas como leer, coser manualidades etc.

  • En cuanto a los oídos, en caso de hipoacusia deberán usarse las ayudas técnicas necesarias. Para detectar cambios en la disminución de agudeza auditiva y visual y detectar a tiempo posibles complicaciones es importante acudir al menos una vez al año al control por oftalmología, optometrista y ORL.

     

     

    Ejercita tu memoria


    Uno de los principales miedos de las personas mayores y su entorno es la pérdida de memoria y de capacidades cognitivas. Si bien en algunos tipos de demencia no podemos hacer mucho para evitarlas, en términos generales es conveniente mantener una mente ocupada en un cuerpo sano. Esto quiere decir que, además de mantener una dieta y actividad física ajustada, también hemos de mantener el cerebro activo: tener intereses intelectuales (incluso aprender cosas nuevas), afición por la lectura, pasatiempos y sobre todo realizar actividades sociales van a mantener la mente activa.


    Relaciones sociales y sexo


    Llegando a este punto queda claro que mantener relaciones sociales va a ser principal para mantener una vida sana a edad avanzada. Ayuda a mantener el estado cognitivo, mental y de memoria en forma y mantiene el estado de ánimo. Esto además ayuda también a detectar de forma precoz deterioros y problemas de salud.
    Mención especial merece aquí la sexualidad en la tercera edad. A medida que nos hacemos mayores las necesidades sexuales no desaparecen, sino que cambian, poniendo más el acento en aspectos como la ternura y las caricias en los contactos sexuales, por encima de otros aspectos, como la potencia o la frecuencia de estos, que van a verse limitados por el estado físico o de salud. Debemos eliminar los prejuicios y admitir el sexo entre personas mayores.


    Lo que debes saber…

       

      • Las comidas conviene que sean a horas regulares, ajustando su textura al estado de la boca y piezas dentarias, comiendo con el tiempo suficiente para evitar atragantamientos.

      • Las caídas en las personas mayores constituyen un riesgo importante, por las lesiones y secuelas que pueden comportar. Realizar actividad física ayudará, entre otras cosas, a mejorar el equilibrio.

      • La higiene corporal ha de ser diaria (mejor ducha que baño) con agua tibia y poco jabón (neutro) porque la piel es más delicada. El secado se hará sin frotar, insistiendo en los pliegues para evitar el acúmulo de humedad, y se aplicarán cremas o lociones hidratantes.

         

         







 

 

martes, 8 de marzo de 2022

ACTUACIÓN ANTE LAS QUEMADURAS

Definimos las quemaduras como las lesiones que se producen en la piel como consecuencia de la acción de agentes físicos, térmicos o químicos que ocasionan la destrucción celular de la piel, de sus anexos e incluso de los tendones y músculos. Además, las quemaduras ocasionan edema y pérdida de líquidos debido a la destrucción de los vasos sanguíneos que quedan afectados.

 TIPOS DE QUEMADURAS


QUEMADURAS SOLARES

De la radiación electromagnética que procede del sol, únicamente una parte alcanza la superficie de la Tierra. De todas ellas la radiación UVB, de longitud de onda comprendida entre 280 y 320 nm, constituye aproximadamente el 0,1% de las radiaciones que nos llegan del sol y causa de las quemaduras solares.

Además del bronceado y del eritema solar, la radiación UVB también es la responsable de la disminución del sistema inmunitario de la piel, que se vuelve más susceptible a presentar el ataque de agentes patógenos como el virus del herpes. Esta acción reductora del sistema defensivo del organismo también está relacionada con las reacciones de fototoxicidad al interaccionar la luz del sol con ciertas sustancias químicas como algunos medicamentos.

QUEMADURAS POR CONTACTO ACCIDENTAL CON LIQUIDOS

Esta es una de las causas más frecuentes de quemaduras graves, especialmente en los niños pequeños. Los líquidos calientes se extienden con rapidez por la superficie cutánea penetrando con facilidad hasta capas más profundas. Los líquidos de naturaleza grasa (aceites) son todavía más dañinos, puesto que poseen una mayor adherencia a la piel.

QUEMADURAS POR VAPORES Y GASES


La exposición intensa a los vapores y gases producidos por la combustión o ebullición de diversas sustancias puede producir quemaduras en la superficie de la piel y las zonas expuestas, como nariz, garganta o zonas aéreas.

QUEMADURAS POR SUSTANCIAS QUIMICAS

Las sustancias cáusticas, ácidas o alcalinas producen quemaduras al contactar con la piel. En el caso de entrar en contacto con un álcali, no debe ponerse la piel en contacto con el agua, ya que puede producir quemaduras. Hay que tener especial precaución con los productos de limpieza de uso habitual, en particular los que contienen amoníaco o decolorantes, puesto que pueden ocasionar lesiones graves en los ojos y en la piel.

 

QUEMADURAS POR ELECTRICIDAD

Las quemaduras por electricidad pueden ser de dos tipos: por contacto y por fogonazo. En el primer caso, se ve afectada una pequeña pero profunda zona, con cierta destrucción de los tejidos, que acaban separándose y desprendiéndose. Por el contrario, las quemaduras por fogonazo son más superficiales y afectan a una zona más extensa de la piel, por lo que su tratamiento es similar al de las quemaduras superficiales.

Las lesiones producidas por una descarga eléctrica deben ser tratadas por un especialista, ya que, a pesar de que en ocasiones parecen de carácter leve, pueden originar lesiones internas graves. Si el choque eléctrico ha sido intenso, pueden producirse alteraciones del ritmo cardíaco, puesto que el corazón funciona con pequeños impulsos eléctricos, por lo que podría modificarse el ritmo del latido del corazón e incluso ocasionar un paro cardíaco y respiratorio.

 

QUEMADURAS POR FUEGO DIRECTO 

Junto a las quemaduras producidas por contacto con líquidos calientes, el fuego directo es el agente más frecuente de quemaduras graves.

Las lesiones producidas por una descarga eléctrica deben ser tratadas por un especialista, ya que, a pesar de que en ocasiones parecen de carácter leve

 

GRADOS DE QUEMADURAS

https://medlineplus.gov/spanish/ency/images/ency/fullsize/1078.jpg





QUEMADURA SUPERFICIAL O DE PRIMER GRADO 

El ejemplo más conocido de este tipo de quemaduras es la típica quemadura solar, en la que se produce una congestión superficial de los vasos sanguíneos

-Hhinchazón, sensación de calor y dolor variable

- Enrojecimiento de la piel y, a continuación, su descamación. 

-Este tipo de quemadura produce un mínimo daño epitelial y suele curarse espontáneamente al cabo de 4 días sin dejar cicatriz, aunque existe la posibilidad de que aparezcan después zonas hiperpigmentadas.

 

 

 

 


 

QUEMADURA DE ESPESOR PARCIAL O DE SEGUNDO GRADO 

-Afecta siempre a la dermis. 

-Se produce un edema de los tejidos superficiales. Esta acumulación de líquidos bajo las capas externas de la piel origina la formación de vesículas y ampollas en ella.

- Produce hinchazón y dolor muy intenso. 

-Su cicatrización es lenta y puede producirse también una pérdida permanente de los anexos de la piel como los folículos pilosos, las glándulas sudoríparas y las glándulas sebáceas. 


 

QUEMADURA DE TERCER GRADO 

-Se trata de una quemadura de pronóstico grave, ya que en este caso se produce una pérdida de tejidos en todo el espesor de la piel (así como todos sus anexos cutáneos)

-Afecta al tejido adiposo, nervios, músculos e incluso huesos, por lo que no se dispone de tejido epitelial para la regeneración de la piel. Por ello, cuando se produce esta quemadura se origina una ulceración, una escara seca, blanquecina o negruzca (es frecuente observar áreas carbonizadas, de color negro o deshidratadas, de aspecto blanquecino). 

-Puede acompañarse de un dolor intenso alrededor de la quemadura o su ausencia si se ha producido un gran daño en el tejido nervioso de la zona.

- Acaba dejando secuelas y cicatrices visibles con partes atróficas, hipertróficas o queloideas. La gravedad de este tipo de quemaduras es variable, en función de la extensión o superficie afectada, de su profundidad y, por supuesto, de su localización.



TRATAMIENTO DE QUEMADURAS

 *PONER LA ZONA BAJO AGUA FRIA



shower-1027904_640 

No hablamos de apagar llamas con agua, que ya sabemos que no hay que hacerlo,  hablamos de refrescar y bajar la temperatura de una zona quemada pero en la que no hay llama, hablamos de una zona quemada por contacto con fuentes de calor tales como, por ejemplo, líquidos hirviendo.

En este caso, hay que poner la zona quemada bajo agua fría, y si por ejemplo la zona es extensa, habrá que poner directamente al herido bajo la ducha, con agua fría, pero no helada, es decir, fría pero con un punto tebia, para evitar un contraste demasiado fuerte. 

 

*NO DESPEGAR NUNCA LA ROPA QUEMADA QUE SE HA ADHERIDO

Esto es importantísimo, ya que si arrancamos la ropa adherida a la piel quemada podemos arrancar tejidos y capas de la piel más allá de la superficial, y esto puede provocar graves heridas que empeorarán la situación inicial.

Debemos dejar que sean los profesionales sanitarios los que, con sus conocimientos y en un entorno esterilizado, procedan a separar estos tejidos quemados y adheridos de la piel quemada de la persona que ha sufrido las quemaduras.

 

*NO APLICAR POMADAS NI NINGUNA SUSTANCIA

Podemos hacer mucho daño sin querer al herido si ponemos pomadas o sustancias sobre una zona quemada, ya sea leve o grave. 

Serán los responsables sanitarios los que, a posteriori de las primeras actuaciones en un entorno apropiado y esterilizado, apliquen pomadas específicas para ayudar en el proceso de curación de una zona quemada, pero nunca debemos ser nosotros lo que lo hagamos, puesto que no tenemos los conocimientos necesarios para hacerlo como es debido.

 

*NO TOCAR NI ACTUAR SOBRE PIEL MUERTA O AMPOLLAS

También esta medida fue comentada la semana pasada, pero es importante recordar que nunca debemos pinchar las ampollas ni arrancar o extraer piel muerta. Dejemos por favor que sean los médicos los que lo hagan cuando y de la manera que ellos crean conveniente.

Es un impulso muy humano proteger a un ser querido que ha resultado herido, y podemos caer en el error de pensar que arracar la piel muerta o pinchar ampollas puede mejorar la situación del herido, pero es un grave error, puesto que podemos abrir caminos a gérmenes que infecten y empeoren una situación ya de por sí complicada y peligrosa

 

*NO DEJAR SOLO AL HERIDO

ambulance-155854_640Aunque pensemos que está bien y veamos que está consciente, un herido por quemaduras graves puede desmayarse, tener una bajada muy fuerte de temperatura, y hay que estar con él para tener consciencia en todo momento de cómo está en cada momento.

Pensemos que un herido por quemaduras graves podría necesitar incluso reaminación cardio-pulmonar, y si sabemos hacerlo, deberemos actuar rápidamente. Por esto, es fundamental no dejar al paciente solo. Además, un herido suele estar muy asustado e incluso desorientado, y la simple companía que le podamos dar será un factor de calma importante que le ayudará a no aumentar una situación de shock y de nervios muy elevados.